Diferentes tipos de sociedades en México
Sep 14, 2022México es la segunda economía más grande de Latinoamérica por lo que, en años recientes, un alto número de industrias competitivas han prosperado y han dado al mercado mexicano una variada, dinámica e interesante plataforma para la inversión nacional y extranjera como nunca antes.
Para comenzar una empresa, entendida como la actividad tendiente a coordinar el trabajo de las personas con elementos tangibles e intangibles, para producir y ofrecer bienes o servicios al mercado general con un propósito de lucro; en ocasiones es conveniente pensar en la constitución de una sociedad mercantil, la cual, sin lugar a duda, es coloquialmente identificada como empresa.
De acuerdo a la legislación mercantil nacional, hay varios tipos de sociedades en México, como lo son:
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Sociedad en Nombre Colectivo (S.N.C)
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Sociedad en Comandita Simple (S. en C.)
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Sociedad de Responsabilidad Limitada (S. de R.L.)
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Sociedad Anónima (S.A.)
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Sociedad en Comandita por Acciones (S. en C. por A.)
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Sociedad Cooperativa (S.C.)
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Sociedad por Acciones Simplificada (S.A.S)
En todas ellas se puede optar por establecer una parte variable en el capital (identificada en la denominación o razón social con la inscripción “de C.V.”), con excepción de la Sociedad Cooperativa, la cual forzosamente debe tenerla, todas ellas tienen una regulación específica que debe analizarse individualmente. En este sentido, las sociedades con mayor preferencia en el público emprendedor son la Sociedad Anónima de Capital Variable (S.A. de C.V.) y la Sociedad de Responsabilidad Limitada de Capital Variable (S. de R.L. de C.V.); seguidas del tipo social de creación más o menos reciente, la Sociedad por Acciones Simplificada (S.A.S).
Vale la pena saber que, fuera de la lista que mencionamos, existen, entre muchas otras, sociedades como la Sociedad Financiera de Objeto Múltiple (SOFOM) y la Sociedad Financiera Popular (SOFIPO), y modalidades de la Sociedad Anónima como la Sociedad Anónima Promotora de Inversión (S.A.P.I.), la Sociedad Anónima Promotora de Inversión Bursátil (S.A.P.I.B.) y la Sociedad Anónima Bursátil (S.A.B.), las cuales, son sociedades más complejas que las enunciadas en los puntos anteriores, recomendadas para empresarios que persiguen fines específicos y con un alto grado de experiencia empresarial.
Hablemos a grandes rasgos de las diferencias entre los tres tipos sociales preferidos por los emprendedores, en el orden de complejidad de las mismas, es decir, en el camino ideal que consideramos, debe ser seguido por el emprendedor para tener una experiencia y crecimiento gradual.
1. Sociedad por Acciones Simplificada (S.A.S.)
Este tipo social podemos encontrarlo reflejado en legislaciones como la argentina y colombiana. Es relativamente un nuevo concepto que fue anunciado en el 2016 como parte de las reformas a la Ley General de Sociedades Mercantiles. Este tipo social esta dedicado a emprendedores que busquen dedicarse al comercio dentro de los límites de la ley con las bondades que esta ofrece, en un esquema encaminado a la formalidad. Es importante mencionar que, durante muchos se exigió un mínimo de dos socios para constituir cualquier tipo social, con la inclusión de este tipo social, pudimos acceder a la posibilidad de constituir sociedades unimembres, con un solo accionista. Así, solamente será recomendable optar por esta, si se tiene en mente iniciar un negocio familiar pequeño o bien, es su primer acercamiento a la formalidad y a la actividad empresarial.
Algunas de las bondades que presenta son la constitución gratuita por medios electrónicos, la cual puede realizarse en un solo día y resulta provechosa para iniciar la operación de los negocios contemplados de manera más ágil; y la o las personas que la constituyan gozarán de la protección patrimonial que genera constituir una persona moral, al tratarse de personas distintas. Por el contrario, una desventaja en ella es que no puede ser su accionista una persona física que ya es accionista de otra sociedad, ni una persona moral alguna.
Por otra parte, existe la necesidad de transformar a la sociedad en cualquiera de los tipos sociales ya listados cuando se ha marcado un claro crecimiento, estimado con base en la facturación anual de $5’000,000.00 M.N. (cinco millones de pesos, Moneda Nacional). En este caso, la ley considera que el emprendedor alcanzado la madurez necesaria para dar el paso al siguiente nivel y para acometer una empresa de magnitudes superiores.
2. Sociedad de Responsabilidad Limitada de Capital Variable (S. de R.L. de C.V.)
La aparición de la Sociedad de Responsabilidad Limitada responde a la evolución que sufrió la Sociedad en Nombre Colectivo. El producto de dicha evolución se generó por la necesidad de que empresas de pequeña y mediana importancia, conformadas por un grupo cerrado de personas que se conocen profundamente, figuraran en el comercio y que sus socios gozaran de más libertad, sin arriesgar la totalidad de su patrimonio y sin las complicaciones exigidas por la Sociedad Anónima que, como veremos se reserva para grandes empresas, los cuales ponen en juego intereses colectivos que hacen necesaria la intervención del Estado para protegerlos.
Por ello, podemos decir que esta es una sociedad mixta donde un factor fundamental son las cualidades personales de los socios que la integran y por otra parte existe un equilibrio respecto del capital que estos pueden aportarle a la sociedad. No obstante, es fundamental saber que, debe estar constituida al menos por dos y no más de cincuenta socios. Asimismo, el capital de esta sociedad se encuentra representado por partes sociales, las cuales, por la naturaleza misma de la sociedad, cuentan con una restricción a su circulación.
Al mismo tiempo, los socios disfrutan de una protección patrimonial al constituirse y dar nacimiento a una persona moral distinta a ellos, por lo que los socios únicamente están obligados al pago de sus aportaciones y en caso de que se pacte en los estatutos sociales, al pago de sus aportaciones suplementarias.
3. Sociedad Anónima de Capital Variable (S.A. de C.V.)
Este tipo social es considerado como una sociedad de capitales, lo cual significa que, para ella existe una preferencia sobre el capital aportado y no sobre las cualidades personales de los accionistas que la integran. Así, su estructura la hace especialmente adecuada para realizar empresas de gran tamaño.
Al no tener un número máximo de accionistas, se facilita la obtención de una masa capital considerable por aportación de los accionistas. Dicho capital se representa por acciones, las cuales son títulos nominativos cuya fácil negociabilidad, le permite transmitirlo, en principio, sin restricción alguna.
Como se ha mencionado, su versatilidad le permite ser la base de instituciones de crédito y sociedades que cotizan en bolsa.
Como puede advertirse, los objetivos específicos y requerimientos empresariales impactarán en el ideal de la estructura corporativa para una empresa. Antes de adentrarse e incorporar una persona moral en México, es mejor consultar con expertos en la materia, en Kroy Abogados podemos guiarte hacia el mejor tipo de estructura corporativa para tu empresa.
Si tienes interés respecto de cualquier tipo de sociedad, no dudes en contactarnos.
Colaboración de Victor Martínez
victor@kroy.com.mx
Derecho Corporativo